Publicado por: Paloma Mendoza-Cortés - mar 03, 2022
En 2017 se publicó en la Revista del CESNAV México el artículo “Guerras Híbridas”, (leer aquí), en el cual se analiza la evolución de los conflictos bélicos, así como las características las Guerras de Quinta Generación (5GW). Este novedoso enfoque, tal vez poco probable para los militares latinoamericanos más conservadores, al final logró impulsar la reformulación de la estrategia y arte operacional de los ejércitos más poderosos del mundo. Para entrar en contexto, la clasificación de las guerras por generaciones considera hasta ahora cinco etapas:
1ª Generación (1GW). Guerras de mano de obra en masa (batallas entre ejércitos de estado, Primera Guerra Mundial).
2ª Generación (2GW). Guerras de concentración del poder de fuego (guerras de trincheras).
3ª Generación (3GW). Guerras de maniobras (Segunda Guerra Mundial, Blitzkrieg).
4ª Generación (4GW). Guerras de insurgencia y terrorismo (Guerras asimétricas o No Convencionales).
5ª Generación (5GW). Guerras de no-contacto (uso de medios militares tradicionales incluida la Guerra Irregular y la Guerra Asimétrica, más el uso de medios políticos, diplomáticos, económicos, sociales, tecnológicos, culturales, criminales, información, desinformación, actores no estatales, etc.).
El concepto de Guerra Híbrida (Hybrid Warfare) fue establecido por William S. Lind, Keith Nightingale, John F. Schmitt, Joseph W. Sutton y Gary I. Wilson en su artículo de 1989 The Changing Face of War: Into the Fourth Generation, el cual subraya la dimensión tecnológica para el empoderamiento de los actores no-estatales, así como la incremental importancia de las operaciones psicológicas.
En 2005 Frank G. Hoffman y James Mattis en su artículo “Future Warfare: The Rise of Hybrid Wars” reconocieron, con base en las guerras de Irak y Afganistán, la emergencia de desafíos irregulares (tradicionales, irregulares, catastróficos y disruptivos) con pequeñas ventajas tácticas magnificados a través de la guerra de la información, la cultura y el lenguaje que desde su perspectiva fundamentan el replanteamiento de la estrategia militar para adaptarla a las nuevas condiciones.
Si bien podemos considerar que al conflicto bélico de Siria como una antesala que reflejó cada una de las dimensiones de guerra híbrida junto a las características de una Guerra Proxy, lo que estamos viendo en Ucrania puede determinarse como el primer conflicto bélico totalmente híbrido en la historia de la humanidad.
Podemos considerar también, que la invasión militar de Rusia a Ucrania fue anticipada durante meses por la inteligencia estadounidense, que contaba con imágenes satelitales del desplazamiento de 150 mil tropas rusas hacia la frontera con Ucrania desde el otoño pasado. En consecuencia, no se trató de un fallo de inteligencia, sino una falla de los mecanismos tradicionales de la diplomacia internacional para evitar conflictos bélicos, especialmente de la ONU.
El presidente Putin justo al final de la intervención en el Consejo de Seguridad de la ONU anunció la operación militar pasando por alto los protocolos del Derecho Internacional Humanitario, hecho que por el cual la Corte Penal Internacional ha anunciado el inicio de una investigación sobre crímenes de guerra y de lesa humanidad.
En los mapas elaborados por el Institute for the Study of War (ISW) podemos distinguir que el ataque inicial fue mediante una maniobra de doble envolvimiento o pinza con el uso intensivo de aeronaves, artillería y blindaje como el helicóptero Kamov Ka-50 “Tiburón negro”, los aviones Sukhoi Su-25 “Grach”, el lanzacohetes MLRS (M270 Multiple Launch Rocket System), el lanzacohetes múltiple BM-30 “Smerch”, etc.
Estas imágenes nos dieron una perspectiva general del uso simultáneo de una de las más tradicionales doctrinas operacionales rusas denominada operación en profundidad (glubokaia operatsiia) creada por Vladimir K. Triandafillov y Mijaíl Tujachevski, considerados como los padres del arte operacional ruso.
Fuente: Institute for the Study of War (ISW)
La guerra en profundidad, en términos muy generales, privilegia el uso de ataques simultáneos sobre el enemigo a través de aeronaves y artillería para la posterior penetración de las unidades blindadas, paracaidistas e infantería con el objetivo de envolverlo y destruirlo, a la par de la destrucción de las líneas de suministro y cuarteles militares.
Al mismo tiempo hemos sido testigos de la praxis de la doctrina Gerasimov, elaborada por el actual jefe del estado mayor del ejército ruso, que considera el uso gradual y a largo plazo de actores no militares en los conflictos bélicos con un objetivo político, económico y social para crear una condición favorable previa y obtener los objetivos estratégicos.
La doctrina Gerasimov considera además de los medios militares tradicionales, el uso del ciberespacio, uso de paramilitares y mercenarios, infiltración de inteligencia, ataques terroristas, propaganda y contrapropaganda, manipulación social, medidas económicas, etc.
Las imágenes compartidas en redes sociales por los ucranianos las últimas horas en las cuales se observan a los tanques rusos varados en los caminos rumbo a Kiev, hacen pensar a los analistas militares que los rusos están enfrentando severos problemas logísticos, problemas operacionales, bajo rendimiento de las tropas y problemas de sostenimiento de las operaciones rusas.
También intervienen otras variables desconocidas, como democratización del uso de inteligencia de fuentes abiertas (Open-Source Intelligence, OSINT) y de inteligencia de imágenes (Imagery Intelligence, IMINT), por ejemplo, gracias al satélite de imágenes de alta resolución de la empresa privada MAXAR para el análisis de las operaciones rusas y que muestran el lento avance de un convoy ruso de más de 60 kilómetros con dirección a Kiev.
De igual forma, analistas occidentales especializados en Rusia, se cuestionan hasta qué grado el comportamiento del presidente Putin, con base en su toma de decisiones y declaraciones públicas, sigue al patrón de conducta conocido hasta ahora. Este cuestionamiento fue a raíz de la toma estratégica de la planta nuclear en Chernóbil y del anuncio de poner en alerta a las fuerzas disuasión, que son las responsables del armamento nuclear.
Desde otra perspectiva, las supuestas fallas de los militares rusos podrían ser considerados como un engaño estratégico para ocultar una sucesiva serie de operaciones de mayor magnitud propias de la guerra en profundidad.
Reconociendo la habilidad del movimiento geoestratégico de Putin, quien sorprendió con un vertiginoso cambio del discurso de no agresión a Ucrania para declararle la guerra justo después de la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, así como la declaración de independencia de las regiones separatistas de Donetsk y Luhansk para después enviar tropas frente a la incredulidad de los ucranianos, no podemos descartar la posibilidad de engaño estratégico.
Lo anterior condujo a un efecto cascada frente al cual la diplomacia internacional comenzó a reaccionar con una operación de marginación económica a través de la expulsión del sistema de la Society for Worldwide Interbank Financial Telecommunication (SWIFT), el congelamiento de activos bancarios rusos, el cierre del espacio aéreo de casi toda Europa y finalmente, la activación por primera vez en la historia, de una fuerza de respuesta de la OTAN.
De igual forma los militares privados (mercenarios) han jugado un papel fundamental para la geoestrategia y engaño estratégico de Rusia desde hace años, incluso antes de la llegada de Putin al poder. Principalmente el Wagner Group ha jugado un papel fundamental para inteligencia, logística, operaciones encubiertas, etc. en todo el mundo, principalmente Ucrania, Siria y Libia donde han operado como Proxy.
En enero de 2022, algunos medios publicaron la movilización de grandes contingentes de mercenarios abandonando África con destino a Europa del Este, con el inicio de la invasión se han difundido versiones sobre la existencia de un comando de fuerzas especiales de Wagner Group con la misión de asesinar al presidente Zelensky, a todo el gabinete de gobierno y al alcalde de Kiev antes del sábado 27 por la mañana, cuando Rusia había calculado tomar la capital de Ucrania.
Sector de Private Military Company The Wagner Group
Fuente: New York Post.
En la dimensión del ciberespacio, durante muchos años Ucrania ha sido considerado como una especie de laboratorio donde Rusia experimenta sus ataques cibernéticos contra los países de Occidente. Si consideramos a los ataques cibernéticos como actos bélicos, entonces podemos afirmar que el ataque de Rusia comenzó días antes de la invasión militar, ya que desde una semana antes de la invasión, el 15 de febrero, Ucrania fue objetivo de grandes ciberataques generalizados DDoS (denegación de servicio) por parte de la Agencia de Inteligencia Militar Rusa (GRU) que afectaron a toda la banca y al ministerio de defensa.
Un día antes de la invasión, el 23 de febrero, todos los sitios del gobierno de Ucrania fueron afectados por una serie de ciberataques, a fin de quedar inactivos en la madrugada del jueves 24, para lose cuales fue utilizada una herramienta de borrado de datos llamada Malware Wiper en los sitios web del parlamento, del servicio de seguridad y del gabinete de ministros, así como de contratistas relacionados al gobierno.
Una vez iniciada la invasión, la continuidad de los ciberataques provocó apagones intermitentes de internet en Ucrania y saturación de las redes de celular que impedían las llamadas de voz. En el ciberespacio de Rusia, páginas de internet del gobierno sufrieron ataques similares, los cuales fueron revindicados por el colectivo Anonymous, quienes de declararon la ciberguerra a Rusia.
Anonymous publicó en su blog un listado de objetivos rusos para ser atacados, el colectivo también interfirió la señal de televisión del gobierno ruso para transmitir el himno nacional de Ucrania, interceptó la radiofrecuencia de las tropas rusas y ha logrado dañar severamente la ciber-infraestructura con la que China está apoyando a Rusia en la guerra de información.
Fuente: https://notes.anonpaste.org
La autodenominada “pandilla de ransomware” Conti publicó en su blog un posicionamiento inicial de apoyo a Rusia donde advertían que si se organizaba un ataque cibernético contra Rusia ellos harían un contraataque a las infraestructuras críticas del enemigo, sin embargo, después de una filtración de información comprometedora sobre recientes operaciones de Conti contra Shutterfly y la operación de ransomware Diavol de Conti/TrickBot, al parecer por un miembro pro-Ucrania, Conti reformuló su statement afirmando que no están alineados a ningún gobierno y condenaban la guerra.
Otro aspecto a considerar es que el gobierno de Ucrania ha convocado no sólo una legión extranjera para combatir, sino también el mismo Ministro de Transformación Digital de Ucrania, Mykhailo Fedorov, ha hecho pública una convocatoria para reclutar ciber especialistas para hacer frente a los ataques cibernéticos. También a solicitud del ministro Fedorov a Elon Musk, se puso a disposición de Ucrania el satélite Starlink para dar servicio de internet gratuito y sin interrupciones. De igual forma Facebook, YouTube y Twitter prohibieron y negaron acceso a toda cuenta rusa que monetice en sus plataformas.
A lo anterior se suma la dimensión de la guerra de desinformación y propaganda, entre Oriente y Occidente, principalmente a través de redes sociales. Por el lado de Ucrania se han viralizado cientos de videos que muestran el valor de los civiles ucranianos por defender a su país de los invasores, incluso mujeres con fusiles Kaláshnikov en mano o preparando bombas molotov y padres de familia apostados en trincheras improvisadas acompañados de un cachorro llamado “Rambo”. También videos de los bombardeos en zonas residenciales o tanques rusos aplastando vehículos civiles o el ya legendario audio de los vigilantes de Isla Serpiente que respondieron “Buque de guerra ruso, vete a la mierda” como respuesta a la llegada del enemigo.
Ukrainian soldiers spot freezing puppy alone outside, and take him into their post. He stands guard for them now. They've named him Rambo. ???❤️ #Ukraine #UkraineRussia #RussiaUkraineWar #rambo #Kiev #WARINUKRAINE #UkraineInvasion pic.twitter.com/UeiFGPZYd0
— The Albanian Times (@AlbanianTimes) February 26, 2022
